Punto era solo un punto aburrido, hasta que un día decidió moverse. En su camino, dibujó una línea recta, su primera línea recta. A partir de allí, conocerá a otros como él y junto a ellos transformará su entorno. Esta obra de la premiada artista siria residenciada en Estambul, presenta las formas geométricas y cómo a partir de ellas podemos dibujar un mundo de cosas, pero también habla de la necesidad de entendernos como individuos y nuestro aporte al trabajo en comunidad.