El descubrimiento más trascendental de los teóricos de la ecología de libre mercado es que existen unos procesos espontáneos movidos por la propia fuerza creativa de la función empresarial que tienden a que el desarrollo económico y social.
El libro demuestra que la intervención del gobierno a menudo agrava los problemas de la naturaleza y de los recursos naturales debido a una deficiente información y a una errónea política de incentivos.