Tras su primer encuentro cara a cara con el cardenal Trebaldi, El escorpión apenas logra salir con vida. Pero para él, la muerte sigue siendo solo un juego, apenas uno de los resultados posibles en sus aventuras. Buscando en el pasado, El Escorpión descrubrirá el secreto mejor oculto del vaticano: una bruja quemada en la hoguera y un sacerdote desviándose de su camino. Un sereto que ha cobrado vidas y aún podría cobrarse más, si nadie hace nada para evitarlo.